BARACK OBAMA, NADA ESPECIAL

Algunos lo entendimos como desproporcionado, otros como necesario para animar a un cambio en la política internacional, pero al fin se ha demostrado que el premio Nobel de la Paz al señor Barack Obama fue todo un desprestigio para estos galardones. EEUU, aliado de Israel, tampoco esta vez ha condenado el asalto a la flotilla humanitaria Mavi Mármara, que pretendía romper el bloqueo a los palestinos en la franja de Gaza, más bien se ha dedicado a lamentar los acontecimientos. A pesar de la condena casi unánime al ataque israelí contra la flotilla, el gobierno de Barack Obama, se resiste aún a culpar directamente a su principal aliado en Medio Oriente. Su mandato, que tampoco está siendo brillante o por lo menos no tanto como se esperaba que fuese, no está significando un cambio radical en las políticas del señor Bush, aquel que se acabó convirtiendo para muchos en el diablo encarnado en hombre.
Hay muchas personas anónimas y personajes públicos que seguramente se merezcan más el premio Nobel de la Paz, con años y años de labor y gestión incalculable que examinar a priori, en cambio decidieron apuntarse al carro mediático, concediendo este galardón por la fama y la popularidad eventual de un señor de color que podría ser el primer afroamericano en ocupar el despacho oval.
El presidente de EEUU esta demostrando que era tan solo un producto del marketing, aquel que se pretendía que fuera un revolucionario de la política, una figura de leyenda la cual recordar como un mito en los libros de historia, el que reinventaría América, ha resultado ser un auténtico fracaso. En los mercados de bienes y servicios este hubiese sido el típico producto denunciado ante las asociaciones y agencias de protección de los derechos del consumidor, por engaño y estafa al comprador.
Lo que iba a ser su gran proyecto de legislatura, la reforma sanitaria en EEUU, ha resultado ser un paupérrimo sucedáneo, claudicando así ante los sectores más reacios e inmobilistas de la sociedad norteamericana. En cuanto a la política exterior demócrata no ha habido cambios realmente significativos, simplemente se han unido a la política de gestos del señor Zapatero, como el cierre de Guantánamo, que ha supuesto una metástasis de presos por toda Europa, eludiendo así las responsabilidades de las atrocidades cometidas por su país.
El último despropósito de la administración Obama ha sido el refugiar a Israel de una dura y merecida condena internacional, amparando así a su eterno e impune protegido.
Solo quiero terminar esta entrada en mi blog rindiendo mi más sincero reconocimiento a todos los activistas, que jugándose la vida, decidieron mostrarnos que otro mundo es posible, que todos los seres humanos que habitan este planeta tienen que tener acceso a las mismas oportunidades. Al estado de Israel solo recordarle que en los territorios en conflicto también existen personas que luchan por vivir, no todos son terroristas. Imprimir artículo